20 septiembre 2010

Caída no es tropezón

Esta mañana jugamos un partidazo. De esos en los que uno queda contento de lo bien cansado y satisfecho que terminó. Nuestro grito se hizo escuchar en un día de clima increíble en los Bosques de Palermo, frente a un emocionado Big Red que celebraba sus nuevos uniformes y recarga de baterías.

El principio del partido fue medio desparejo; al llegar el medio tiempo, una cancha medio irregular, nuestro nerviosismo y un contundente Big Red nos había dejado 8-4 abajo. Pero luego de una renovación actitudinal y un par de arreglos tácticos pudimos cambiar la cosa. Una defensa en copa literalmente pateó el tablero y nos dió un lindo empujón para llegar a dominar el tanteador en 11-10.

De allí en adelante el partido fue alucinante; ambos equipos estábamos bien enfocados en un partido de muy buen ultimate y excelente concentración. Creo que lo más destacable del momento fue un notorio clima de respeto entre los equipos: ambos estábamos jugando para nosotros mismos y buscando ese crecimiento propio que permitió un clima deportivo por definición.

El final se vivió con intensidad, fue un gol de oro que terminó siendo para el equipo recientemente apodado de los osos verdes. Una felicitación desde acá.

Sapukay Bs As y Big Red aplauden un muy buen partido

Pero eso fue sólo un punto en una historia que se extiende mucho más allá de un partido. Sapukay y cada uno de nosotros está creciendo de una manera increíble. Desde el día cero que Sapukay está absorbiendo y compartiendo conocimiento a un ritmo que sinceramente me sorprende. Los jugadores más nuevos están aprendiendo más rápido que nadie las cuestiones técnicas y tácticas básicas, y el resto de nosotros está aprendiendo mucho del movimiento general dentro de la cancha. Nuestro físico pide más, así que tendremos que darle duro a ese entrenamiento.

Hoy se vivió una caída, pero Sapukay sigue su ritmo de crecimiento sin tropiezos. Está ganando experiencia y empezando a conocerse bien. Próximamente nuestros uniformes sellarán nuestra identidad y pasión por este maravilloso deporte.


La semana que viene hay descanso, así que será tiempo de practicar las otras artes que involucra el Ultimate. Será momento de acatar las sugerencias de nuestro plantel multicultural y encontrar nuestro grito Sapukay entre cervezas, charla y comida.

Seguiremos creciendo. Vamos Sapukay!

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